Desde la Red y las organizaciones que hacemos parte creemos que las luchas de las mujeres en diferentes lugares de nuestra región están interpelando, además del modelo de desarrollo hegemónico, la forma androcéntrica de producción de conocimientos, con sesgos coloniales y siempre a favor de la acumulación capitalista.
Desde tiempos inmemoriales, nuestros pueblos han acumulado saberes y conocimientos respecto de la naturaleza y de protección de la vida, mucho de este conocimiento ha sido guardado por mujeres en la tradición oral, en los tejidos, en las canciones, en las historias transmitidas por las abuelas de generación en generación. Este diagnóstico es una apuesta por reconocer esta narrativa propia de las mujeres, de poner en palabras las experiencias de dolor y de resistencia para así construir un tejido regional desde variables e indicadores propios. Por esta razón, el equipo de investigación ha estado conformado por compañeras que hacemos parte de los procesos organizativos que han venido acompañando y siendo parte de las luchas de las mujeres, en la mayoría de los casos desde hace años.
Los casos que se han seleccionado para este diagnóstico son de carácter regional y corresponden a organizaciones que son parte integrante de la Red o que, en su caso, son aliadas; este es uno de los principios de trabajo de nuestra articulación, la cual vincula los procesos locales con una mirada latinoamericana. Hemos tomado en cuenta diez países (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras y Perú) y 25 casos.
Respecto de la estrategia metodológica elegida, nos propusimos partir de los materiales elaborados por las organizaciones que conforman la Red en el acompañamiento a cada una de las luchas, así como de la información aportada por las organizaciones aliadas; sobre este material se complementan entrevistas realizadas a mujeres defensoras de cada uno de los procesos. Las tres dimensiones analíticas sobre las que reflexionamos como apuesta teórica-política ecofeminista son: Territorio Cuerpo, Territorio Tierra y Territorio Organizativo, como variables interconectadas desde las cuales pensamos se viven los impactos, pero también las resistencias de miles de mujeres que en estos momentos están defendiendo sus territorios y sus modos de vida. Estas dimensiones están constituidas por una serie de múltiples categorías que fueron sistematizadas.
A partir de este proceso construimos también indicadores propios que incorporan datos relevantes para el reconocimiento de las vulneraciones en las vidas y los cuerpos de las mujeres, desde el daño físico generado por la contaminación, hasta los impactos afectivo-emocionales; desde la ruptura de procesos organizativos-comunitarios hasta la separación familiar; desde el daño ambiental en los territorios hasta la violencia sobre la espiritualidad de las mujeres que las conecta con su medio, entre otras.
