Espinar después de la minería a gran escala, la lucha de las mujeres por sus derechos
Ubicación geográfica
Espinar se encuentra a 3.928 m.s.n.m., el clima oscila con temperaturas entre -4 °C y 19 °C, atmósfera muy seca, con precipitaciones de nieve.
Espinar está conformado por la nación k`ana, cuyos orígenes se remontan hasta antes del incanato, actualmente su población es de más de 75 mil habitantes, ubicados principalmente en Yauri, la capital del distrito.
Breve historia del conflicto
Los conflictos comienzan en los años noventa, cuando la minería a gran escala empieza a operar en la zona donde, al privatizarse, las empresas BHP Billiton y la empresa Tintaya son las primeras que empiezan a operar.
El conflicto del 21 de mayo del 2012 (día de la dignidad espinarense) se inicia un nuevo conflicto para demandar sobre los impactos ambientales (filtraciones cerca de las relaveras, animales que nacen con malformaciones, cambios en el olor y color del agua, desaparición de manantes), fue uno de los más difíciles por su violencia (fallecimiento de 4 personas y muchos heridos).
(Cáceres y Rojas, 2013)
En 2019, la Dirección de Salud informa que luego de tres años de monitoreo ambiental se determina que la población de la ciudad de Espinar consumía agua contaminada con metales, sin embargo, luego se retractan.
En 2020, con la llegada de la pandemia, la población cuestiona su mejora económica y su relación con la empresa minera. La propuesta es que se le asigne un bono universal a toda la población espinarense, financiado por la empresa (en cumplimiento del Convenio Marco firmado en 2013 en el marco del acuerdo interinstitucional, con 8 a favor y la empresa en contra). Al no cumplirse, se reactiva el conflicto, que duró más de 15 días, finalizando con la aprobación del bono y quedando pendientes todos los reclamos de mejoramiento ambiental y atención a la salud de la población.
Perú
Latente
Territorio Cuerpo
Territorio Tierra
Territorio Organizativo
Actores Agresores
Estrategias de Resistencia
Identidad
Material de extracción
Nombre de la empresa y origen
Impactos del conflicto
Territorio Cuerpo
Los impactos físicos a mujeres de Espinar se dan en contextos de conflicto, donde la estrategia empresarial es enviar a terceras personas a golpear a las mujeres que denuncian contaminación para mantener el control social de la población.
No hay un ataque físico como tal desde la empresa minera, sino a través de otras personas, la compañera Elsa Merma ha sido perseguida muchas veces por señoras, han intentado golpearla pero le han golpeado su esposo, diciéndole “dile a tu mujer que deje de meterse en estos problemas, que deje de hablar de la empresa”.
(Karem Luque, Derechos Humanos sin Fronteras, 2020)
Emocionalmente, las mujeres espinarenses están devastadas por la preocupación, el miedo, la frustración, la tristeza, la soledad, la indignación, la angustia, la desconfianza y el menosprecio, emociones negativas muy marcadas, destacando la culpabilidad por vivir en zonas contaminadas, donde sus hijos e hijas pueden nacer con deformaciones o discapacidades. Esa culpabilidad hace que no puedan dormir, que tengan dolores de cabeza, que sufran cuadros depresivos que las llevan a pensar continuamente en que no hay futuro para ellas ni para su familia. “Así, una mujer de la comunidad nos dice que ahora no nacen normales las wawas [hijos], sino que nacen con la boca para atrás”
(Weill, 2017, entrevista 24, p. 33).
El vínculo entre la minería (legal o informal) y la trata de mujeres es evidente, el comercio de personas en zonas cercanas a los campamentos mineros es frecuente en el Perú. Las mujeres que son explotadas sexualmente en prostíbulos clandestinos con fachada de bares, discotecas o clubs provienen de diferentes lugares, siendo Espinar, Cusco y Puno los principales, y de otros lugares (incluyendo Venezuela), en menor frecuencia.
Territorio Tierra
Para las mujeres que viven en territorios contaminados, una de las principales afectaciones aparte de su salud y la de sus familias está relacionada con el normal desarrollo de sus actividades económicas/productivas, los territorios vecinos no quieren comprar la producción de la zona por temor a contaminarse; asimismo, la falta de titularidad de la tierra ocasiona en muchos casos la migración y el despojo de lo poco que tienen; en otros territorios lejanos se sienten desarraigadas, sin sus costumbres, su entorno social y sin sus antepasados, lo que está ocasionando problemas depresivos en las mujeres de Espinar que siempre añoran el retorno.
El tema de despojo es un tema muy fuerte, es un tema de quitarte parte de tu historia, intentar que olvides tus recuerdos de niñez y de tu familia, al sentirse despojadas, reubicadas, sienten que han perdido el valor de decir “yo soy de la zona” […] son mujeres que quedan perdidas en un lugar de donde no son parte […] han perdido todo.
(Karem Luque, Derechos Humanos sin Fronteras, 2020)
Territorio Organizativo
La presencia minera en Espinar es de más de 40 años, en ese tiempo las organizaciones de mujeres se han ido debilitando principalmente por la desconfianza que ha ido en incremento, como parte de la estrategia de la empresa para dividir y debilitar a las organizaciones. Las relaciones machistas se han mantenido a lo largo de los años, las negociaciones entre la empresa y la comunidad se dan a través de los dirigentes masculinos, los cuales además poseen la titularidad de la tierra. El margen de negociación de las mujeres es mínimo, lo cual las convierte en convidadas de piedra en la toma de decisiones para el futuro de Espinar.
Los cargos dirigenciales tampoco están ocupados por mujeres, a veces lo hacen por un tema de cuota, como es el caso de candidatos a la alcaldía […] el Frente de Defensa tienen una mujer en su directiva pero que es la representante de la Secretaría de la Mujer, así como la Federación de Campesinos también hay una Secretaría de la Mujer, los que terminan tomando las decisiones principales son el presidente y el vicepresidente y las otras secretarías son de adorno.
(Karem Luque, Derechos Humanos sin Fronteras, 2020)
Estrategias de resistencia de las mujeres
Durante más de 40 años, las mujeres de Espinar se han organizado para reclamar sus derechos ante la empresa y el Estado. Sin embargo, durante muchos años, la empresa aplicó estrategias dirigidas a minar la confianza entre ellas, logrando debilitarlas. Aún así, tenemos varias compañeras que a veces de manera solitaria reclaman medidas paliativas relacionadas con la asistencia médica en salud y tratamiento por contaminación de metales. El año pasado se realizó la última movilización de las organizaciones, logrando que la empresa otorgue un bono por pandemia a cada una de las familias de Espinar, sin embargo, la atención en salud integral es aún un tema pendiente de resolver por parte de la empresa y el Estado.
Artículos:
- Mujeres, Minería y Salud Mental en Espinar
- Minería Desarrollo y Gestión Municipal en Espinar
- Minas de Glencore Xstrata en Espinar: Impactos acumulativos para la salud y el medio ambiente
Audios:
Mensaje de Karen Luque Ticoma. Integrante de la Organización Derechos Humanos sin Fronteras.
Videos: